Natural de Madrid, era licenciado en Teología por la Universidad Pontificia de Salamanca, habiendo sido ordenado sacerdote en esta diócesis en julio de 1957.

Durante su etapa pastoral, pasó por varias parroquias de la provincia. Comenzó su andadura por la zona de la Moraña, donde fue encargado de Rivilla de Barajas (1958), ecónomo de Fontiveros, Berbuy de Zapardiel y Cabezas del Pozo (1959). En 1993 llegó a San Juan del Olmo, Manjabálago y Ortigosa como párroco. Un año más tarde, era nombrado párroco de Santa Cruz de Pinares y Herradón de Pinares (1994); y en 1995 párroco de La Serrada.

Relacionado también con el mundo de la enseñanza, fue representante de la diócesis en la Junta Económica y en el Consejo de Dirección del Centro de Formación Profesional Juan XXIII, de La Serrada (1985-1986 y 1988).

Fue también juez prosinodal en 1977, y capellán del instituto psiquiátrico de Ávila (1982 y 1987). Su última labor en la diócesis fue la de administrador general de capellanías y obras pías del Obispado de Ávila tras su nombramiento en 2007, cargo que ya había desempeñado en 1977.

Las exequias de celebrarán en la Parroquia de Santo Tomás (10 horas) antes de recibir cristiana sepultura en el cementerio de Ávila.