Para su estreno, el monumento y el gran rótulo con el nombre de Ávila se han iluminado de varios colores. Y es que para el encendido se ha convocado a representantes de diversas asociaciones de discapacidad, con el fin de mostrarles que cuando deseen conmemorar un día internacional determinado con un color concreto sobre el monumento y sobre el rótulo, la iluminación será automática y no manual, como hasta ahora se tenía que hacer. Habitualmente tendrá el color de la iluminación tradicional.

Los representantes de estas asociaciones se han tomado fotos ante el rótulo y el monumento, no así el alcalde, José Luis Rivas, ni el teniente de alcalde Héctor Palencia, que han acudido pero no han posado ni han efectuado declaraciones.

Junto a la ilumimación de los Cuatro Postes en primer plano, el fondo es para la muralla y, dentro de ella, para la nueva luz de la Catedral. Según los detalles del proyecto, la intervención se ha realizado respetando parte de la instalación eléctrica que había antes, además de realizar más canalizaciones y arquetas y una  nueva instalación eléctrica, además de la colocación e iluminación del rótulo corpóreo con el logotipo de Ávila.

Se han cambiado todos los puntos de luz existentes, y su ubicación, por otros de mayor potencia, para una mejor distribución de la iluminación, mejor medida en iluminancia, y una uniformidad más alta.

El consumo energético es el mismo que anteriormente (al pasar de 1.822 watios a 1.873 watios), si bien se ha destacado que se consigue una mejor iluminación de la zona y con más elementos. El consumo es mayor (al pasar de 5.985,27 KW/h a 6.152,81 KW/h) y también la emisión de CO₂ (de 2.394,11 Kg pasa a 2.461,12 Kg).
El rótulo en tres dimensiones de una pieza de 4,55 metros de longitud con 40 centímetros de profundidad y 1,75 metros de altura, colocado sobre una peana, realizado en cinco milímetros de  acero frontal y trasera de dos milímetros, lacado en oxiron negro.

Está formado por la palabra Ávila como parte de la marca Avila y, según se ha recordado, fue cresado en 2012 después de un concurso de ideas, y un “largo proceso participativo de más de ocho meses” y a través de “un consenso de todas las formaciones políticas”.

También se ha destacado que la letra del logotipo se creó tomando como base los textos manuscritos de Santa Teresa, “interpretando los caracteres tipográficos y creando un conjunto legible y atractivo visualmente”, como “guiño al pasado de la ciudad y a uno de los personajes más ilustres y reconocidos por los abulenses”.