Un día después de que Carlos García, respaldado por un buen número de cargos públicos, diputados provinciales y militantes, le pidiera su dimisión, Sánchez Cabrera ha respondido con serenidad, pero al mismo tiempo con claridad, que ese paso no lo dará “bajo ningún concepto”.

"Si el PP considera que este presidente no merece la confianza, tiene la opción de revocar el mandato que tengo, a través de una moción de censura", ha sostenido Sánchez Cabrera, quien ha asegurado que mantiene el acta de diputado provincial y que va a "seguir defendiendo los intereses de los abulenses".

A las acusaciones de utilizar la Diputación con fines propagandísticos y pensando en la campaña de Por Ávila a la alcaldía de la capital, el presidente de la institución provincial ha dicho que en esa misma situación se encuentran los diputados provinciales que volverán a presentarse a las próximas elecciones por sus respectivos municipios.

“Sería inconcebible que renunciaran a su acta de diputado para poder concurrir a las elecciones”, ha aclarado.

Nunca teme a nada

Después de que Carlos García indicara que "todos los escenarios están encima de la mesa", incluida una posible moción de censura, Sánchez Cabrera ha dicho que "nunca" teme "a nada" y que está dispuesto a "seguir trabajando mientras los diputados provinciales" no le demuestren "lo contrario".

Asimismo, ha dicho sentirse "respaldado por la mayoría del plenario, si no se demuestra la contrario a través de una moción de censura".

Sobre la dimisión solicitada por el presidente del PP de Ávila, Sánchez Cabrera ha respondido: "Bajo ningún concepto. Lo único que me planteo es seguir trabajando".

Respecto a Por Ávila, ha dicho que aún no se ha sentado a hablar de los posibles candidatos y de la campaña, aunque ha revelado que "en los próximos días" abordará este asunto, al mismo tiempo que seguirá trabajando como presidente de la Diputación, porque a su juicio "una cosa no es incompatible con la otra".

Sobre las personas en las que tiene delegadas determinadas responsabilidades en la Diputación, entre ellas, Carlos García como vicepresidente, ha comentado que confía en que sigan manteniendo sus responsabilidades "hasta el final del mandato", ya que no entiende por qué "deberían de dejar de realizar ese trabajo".

No obstante, ha advertido que "las delegaciones son del presidente y la aceptación es por parte de los diputados", por lo que "si alguno considera que no debe seguir trabajando, es su responsabilidad".