El regidor, acompañado por la teniente de alcalde de Servicios Sociales, Igualdad de Oportunidades y Seguridad, Patricia Rodríguez, ha clausurado este programa, que ha contado con 200 participantes divididos en dos grupos: uno de 95 niños de entre 3 y 6 años y otro de 105 chavales de entre 7 y 12 años.

El primero de ellos se ha desarrollado en el Centro Vicente Ferrer, situado en la zona norte, y el segundo en el Centro 88 Torreones, en la zona sur de la ciudad. Cada uno de ellos ha contado con siete monitores cada uno, dos coordinadores y un director.

Para el alcalde, lo importante es que durante el tiempo que se han desarrollado ambas actividades, los niños hayan podido tener un “descanso activo” con actividades vinculadas con la pintura, el baile, los malabarismos o los juegos, mientras que sus padres han podido conciliar su vida laboral con la familiar. Esta actividad se ha desarrollado entre las 9 y las 10 de la mañana,  las 14.00 horas en ambos espacios.

Peticiones a los magos

La clausura ha tenido lugar en el Centro Vicente Ferrer, hasta donde se han desplazado los Reyes Magos para recoger las cartas de los niños, que incluyen la petición de regalos que llegarán durante la noche del 5 al 6 de enero.

También el alcalde espera a los Magos de Oriente, a quienes ha pedido “lo mejor” para Ávila. De manera especial “calidad de vida y mucho trabajo”. En este sentido, ha destacado los últimos datos de reducción del desempleo, y que a su juicio tienen que consolidarse para que la ciudad “siga progresando”. Además, ha pedido que Ávila sea una ciudad “tranquila y pacífica”.

En este contexto, Rivas ha interactuado con los niños preguntándoles por los regalos han pedido, así como por su nombre, con escasa fortuna, ya que los niños le conocen como “el alcalde”, sin más, aunque uno de ellos sí sabía su nombre. Algunos más sí han sabido decir el nombre de la teniente de alcalde. Eso sí, no han dudado en los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar.