Lo habitual es que hagan preguntas y ruegos, pero en este caso no, porque así se había acordado en la última reunión de los portavoces, según ha explicado el presidente de la Diputación, Jesús Manuel Sánchez Cabrera.

De hecho, cuando han ido a preguntar, les ha dicho que si no lo habían registrado por escrito no podían hacerlo. El caso es que debería haberse registrado una semana antes, y aunque han alegado que eran asuntos surgidos después, no han podido intervenir. Entonces se han levantado los diputados de IU, Ciudadanos y Trato Ciudadano.

Y segundos después los socialistas, pero ya era el momento en que el presidente daba por concluido el pleno y decía “Felices fiestas”.

Preguntado por el incidente, el presidente ha dicho que en la última reunión de la Junta de Portavoces se adoptó el acuerdo: “comentamos la posibilidad que tienen de presentar por escrito previamente” las preguntas y los ruegos, porque así “se cumple el Reglamento Orgánico de la Diputación”.

“¿Por qué hemos tenido que llegar a este punto?”, se ha preguntado Sánchez Cabrera. Y se ha respondido: “hemos visto que hay determinados portavoces que utilizan solamente el turno de ruegos y preguntas, solamente para un lucimiento personal y para hacer un rédito político”.

Y ha justificado que “la Diputación Provincial no debe ser nunca utilizada para fines partidistas o fines personalistas, que es lo que buscan algunos portavoces”.

Por su parte, al final del pleno los portavoces de la oposición, salvo UPyD, cuyo diputado no se levantó, han reprobado la actitud del presidente. “Se ha demostrado que sólo se hace lo que quieren los tres que han mandando”, ha dicho el diputado de IU, Santiago Jiménez, en referencia al presidente, al vicepresidente y al portavoz del PP.

Jiménez ha dicho que sólo iba a pedir que consultase a los alcaldes sobre el convenio aprobado con Confae, y se ha preguntado si Sánchez Cabrera “tiene el permiso de su partido para seguir haciendo estas barbaridades”.

Por su parte, el diputado de Ciudadanos, Albero Becerril, ha dicho haberse sentido “muy molesto” por la “cacicada” de no dejar participar a la oposición aprovechando el “rodillo”; mientras que el Trato Ciudadano, Rubén Arroyo, para quien la actitud y la “soberbia” no es nueva y procede desde el comienzo del mandato por falta de transparencia.  Desde entonces “no ha contestado ninguna pregunta”.

Según Arroyo, lo que se acordó en la Junta de Portavoces es que se podría preguntar en el pleno para que el presidente contestase en la siguiente sesión “como dice el reglamento”.

El portavoz del PSOE, Jesús Caro, en 15 años en la Diputación “nunca” ha visto “comportamientos como estos”, que ha calificado como “graves”, porque siempre se ha podido preguntar y “siempre el presidente ha contestado”, lo que no ha sucedido en el actual mandato: “nunca ha contestado a ninguna pregunta, pero hoy se ha cruzado una barrera más y no se ha permitido hacer preguntas”.