La concentración o kedada runner ha comenzado con un minuto de silencio en el Mercado Grande, y una ovación, bajo una pancarta con la leyenda “#Queremos corrersinmiedo, #Queremoscorrerlibres y #Niunamas. No es no”, para después marchar por el Paseo del Rastro y volver al punto de partida por las calles Reyes Católicos y Don Gerónimo.

Entre los asistentes había tanto mujeres como hombres y niños para responder a la convocatoria de la atleta Jacqueline Martín con un objetivo: “nuestro derecho a correr, a caminar y a vivir solas y libres”.

La atleta ha destacado la asistencia y “respuesta positiva”, entre ellos atletas. “Esto no es una guerra entre mujeres y hombres, sino entre hombres y mujeres, aunque desgraciadamente lo malo suene mucho y haga mucho daño”, ha señalado Martín.

“No podemos detenernos, se está diciendo que tenemos que salir acompañadas, y eso ni es justo ni a una la tienen que decir si salgo a las cuatro de la tarde o a las diez de la noche, esto no puede limitarnos y obligarnos a encerrarnos en casa”, ha manifestado, tras unirse al dolor de la familia de la joven asesinada.