El número de fumadores atendidos por el programa de deshabituación tabáquica fue de 1.076 en Castilla y León, de los que el 58% fueron mujeres y el 42%  hombres.

Para desarrollar el programa se constituyeron 73 grupos, diez de ellos en el ámbito laboral. La edad media de los participantes fue de 48,4 años, 49,9 años en el caso de los hombres y 47,4 años en el caso de las mujeres. La edad media de inicio en el consumo de tabaco fue de 16 años, destacando que los hombres se iniciaron en el consumo a los 15,2 años y las mujeres algo más tarde a los 16,6 años. Los resultados del programa indican que, al finalizarlo, la proporción de fumadores abstinentes fue del 69,5%, 68% en el caso de los hombres y 71% en el caso de las mujeres.

Otros datos de interés que se extraen del análisis de las personas atendidas en el programa de deshabituación tabáquica en 2017 son que el 38,4% declaró fumar menos de 20 cigarrillos al día (36,5% de los hombres y 39,7% de las mujeres), el 53,2% entre 20 y 40 cigarrillos al día (53% de los hombres y el 53,3% de las mujeres) y el 9,2% más de 40 cigarrillos al día (10,9% de los hombres y 8% de las mujeres). Se trata de grandes fumadores de al menos 20 cigarrillos al día (62,4%) con apenas diferencias por sexo.

El 23,7 % reconoció que era la primera vez que intentaba dejar el hábito tabáquico (23,4% de los hombres y 24,3% de las mujeres), el 49,2% que ya lo había intentado una o dos veces (50,7% de los hombres y 47,9% de las mujeres) y el 27,1% que lo había intentado dejar en tres o más ocasiones (25,9% de los hombres y 27,8% de las mujeres).

La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades desarrolla un programa específico de deshabituación tabáquica en grupo en colaboración con la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en Castilla y León, a la que aporta 50.500 euros para este fin.