Ante esta situación que ha tenido amplia repercusión mediática nacional, el Bosco de Arévalo ha condenado lo sucedido en un comunicado en el que asegura estar “en contra de toda violencia y más en el fútbol base”, una etapa que entiende “formativa para los niños y niñas” de un club en el que “confían cerca de 180 familias”.

Tras responsabilizar de los hechos al padre de uno de los chavales del equipo de Arévalo, precisa en un comunicado de prensa, aludiendo al acta arbitral, que el árbitro del encuentro, Manuel Hernández, recibió un “leve empujón”.

Por ello, el CD Bosco de Arévalo adoptará contra el progenitor de uno de los chavales las "medidas disciplinarias oportunas para intentar que no vuelva a suceder", ya que se trata de “un episodio pésimo para estos niños, que se han llevado una imagen nefasta del deporte en tan temprana edad”.

Y es que el pasado domingo, uno de los campos de Naturávila vivió un supuesto intento de agresión por parte de un padre hacia el árbitro del encuentro que enfrentaba a los chavales de Arévalo, con el Club Deportivo Colegios Diocesanos, de Ávila, dentro de la Primera División Provincial Prebenjamín.

El incidente se produjo al final del partido, cuando el Colegios Diocesanos logró el gol de la victoria en el último minuto (3-2), lo que suponía para los ganadores el título provincial en esta categoría.

Fue entonces cuando "un padre concreto, identificado y con el que se tomarán las medidas disciplinarias oportunas", se dirigió hacia el árbitro al que dio un "leve empujón", tal y como el CD Bosco de Arévalo asegura que el colegiado reflejó en el acta del encuentro.

Tras condenar "la manera en la que se ha tratado la información por algún medio de comunicación", el Bosco ha agradecido al árbitro que "reflejara –en el acta- la ayuda recibida por las personas acreditadas por ambos clubes", así como al entrenador del Colegios Diocesanos, Borja Jiménez, que fuera "el primero en evitar que el suceso fuera a mayores, quedándose en un 'leve empujón'".

El club arevalense lamenta unos "hechos puntuales", protagonizados por "un padre que no representa una institución", a la vez que expresa su "repulsa" por esta acción que "desgraciadamente ha provocado un episodio pésimo para estos niños que se han llevado una imagen nefasta del deporte en tan temprana edad".

Al mismo tiempo, ha pedido "por favor" que no se caiga "en la trampa de empañar la labor de los clubes que se dedican a ello" y que en su caso lo realizan "de manera altruista y desinteresada", como asegura que es su caso.