El sindicato culpa de la reducción del consumo y de sus efectos al Partido Popular, que “se equivoca radicalmente” con su política y al que pide “más coherencia” entre las distintas administraciones para fomentar el consumo “en lugar de paralizarlo”.

Argumentan que la provincia de Ávila tiene “más de 12.000 empleados públicos”, entre los que “se ha dejado sentir” las medidas del Gobierno de la nación, entre ellas, la de suprimir la paga extra de Navidad, contra la que los sindicatos interpusieron un recurso al considerar que era una medida inconstitucional.

Según FSP-UGT, la medida ha provocado un “empobrecimiento” de la provincia, donde “se han dejado de gastar 18.358.000 euros” en restaurantes y comercios, que son pequeñas y medianas empresas.

Aseguran que la medida ha “retraído” un consumo “ya de por sí cicatero”, y consideran que la situación “se va a acentuar” en los meses de enero y febrero, en los que el consumo se va a “frenar en seco” con el consiguiente “perjuicio” para todos.