Acogido al programa de la organización internacional, ha dado fe de la desaparición, tortura y posterior asesinato de su hermano Carlos el 19 de enero de 201, que era un activista estudiantil, contra la explotación minera y energética, y trabajo en barrios marginados.

En su apuesta de “defender la vida, la libertad, la justicia y la impunidad” y a favor de “investigar a los que asesinan a diario sin que se conozca más”, ha advertido que las investigaciones no sirven de nada y no avanzan porque “no se van a investigar a ellos mismos”.

“Asesinaron a mi hermano y siguen asesinando a líderes sociales”, ha dicho ante los socios de Amnistía en Ávila, que han hecho balance de sus actividades del último año con motivo del Día Internacional de los Derechos Humanos. Han participado en la campaña global ‘Valiente’ de defensores de derechos humanos, por el derecho a la vivienda digna, contra la violencia de género, por los refugiados de segunda y por la situación de Siria.