Durante cuatro años viajó por Europa y vivió en España (Salamanca, Barcelona, Palma de Mallorca), habiendo grabado y publicado su primer disco en la capital abulense, cuando trabajaba como auxiliar de conversación de francés en el CEIP Cervantes.

En Calgary (Canadá), donde se había sentido “como una extraña” antes de viajar a España, confiesa ahora que ha “descubierto la libertad” de ser “ella misma” y adoptar “la determinación de sumergirse en la música y abrir una puerta para que la esencia de la vida fluya, incluso el verdadero amor”.

Fue en 2012 cuando grabó en los estudios de Manuel Galán su primer trabajo, que ahora tiene su continuación con ‘A hundred lives’ (‘Cien vidas’), “una colección de historias de un recorrido vital que incluye las aventuras de personas que conoce, personas que admira, y personas que solo vio de paso”. De los 11 temas, uno está cantado en castellano, 'Salvavidas'.

Define su trabajo como “irreverente, sincero, idílico, ansioso, y positivamente absurdo”, donde muestra en sus letras su “optimismo realista y humor estrafalario”. Sus canciones pueden escucharse en una gira por Canadá que el año que viene llegará a Europa.