El objetivo es lograr un “pasillo quirúrgico” que facilite la llegada hasta el lugar donde se calcula que se iniciaron las llamas, a tenor del visionado de las cámaras de los drones policiales que sobrevolaron la fábrica el lunes y de testimonios de los empleados.

Fuentes de la investigación reconocen que la tarea es como “buscar una aguja en un pajar” pero confían en los medios y en los especialistas que trabajan en el dispositivo desde la mañana del jueves.