En agosto de 2016 se le intervinieron más de 120 gramos de cocaína dentro de la operación Mojines. Ahora había aumentado su actividad ilícita, según ha comprobado la Guardia Civil, quien le ha arrestado en la operación Reincidencia II.

El detenido es de origen cubano y vive en Sotillo desde hace varios años. No desarrollaba ninguna actividad laboral pero disfrutaba de una situación económica muy desahogada. Tras esta nueva detención, acusado de ser presunto autor del supuesto delito de tráfico de drogas, la autoridad judicial ha decretado su ingreso en prisión provisional.

Según la investigación, el joven había vuelto a distribuir cocaína en Sotillo y localidades próximas con la activa colaboración de personas de su entorno.

Tras la detención de hace un año adoptaba más medidas de seguridad como la utilización de vehículos de personas conocidas para dificultar ser controlado.

En los registros se incautaron 92 gramos de cocaína en roca compacta y dos teléfonos móviles.

Con esta actuación policial se ha conseguido, principalmente, desmantelar un importante “punto de venta” de cocaína en la localidad abulense de Sotillo de la Adrada, cuyas ramificaciones también afectaban a otras poblaciones próximas de la provincia.