“La naturaleza se va transformando a lo largo de toda la vida, es un proceso evolutivo, pero el hombre va paralizándolo”, por eso es “una crítica al ser humano como especie porque si la naturaleza evoluciona en positivo el ser humano evolucionará en positivo”.

Calvo muestra obras en soportes de planchas de metal oxidado tras un proceso de oxidación hecho a mano, en los que crea paisajes del entorno que ha sido transformado por la misma naturaleza y por la mano del hombre a la vez.

Con técnicas mixtas, usando tinta china o pigmentos secos crear los colores y texturas que tienen su inspiración en la obra de Fernando López Ramón, escritor ‘Viajando en latidos’.

Marta Calvo (Málaga, 1976) es licenciada en Bellas Artes y restaurada de muebles antiguos especializada en obras de arte de Patrimonio Nacional. Actualmente trabajando en varios proyectos de murales para restaurantes en Madrid. La exposición puede verse hasta el 30 de septiembre en la Biblioteca Pública de Ávila.