"Son muchas las personas que, sin padecer la enfermedad, han decidido modificar su dieta y suprimir el gluten de la misma, pensando que se trata de una dieta más sana o de una dieta de adelgazamiento. Ambas creencias son erróneas, y los celiacos queremos hacer hincapié en que la dieta exenta de gluten para nosotros constituye nuestra medicina, el único tratamiento  para nuestro problema de salud". ha expresado Raquel Lobo, la presidenta de la Asociación de Celiacos y Familiares de Ávila (Acefa).

'Ni una moda ni un capricho, una necesidad' es el título del manifiesto, en el que se ha afirmado que "utilizar la dieta sin gluten como un producto de marketing perjudica la imagen del celiaco".

Y es que "cuando no se conoce el alcance de la enfermedad, se puede pensar que nuestra exigencia a la hora de comer fuera de casa, en cuanto a normas de higiene y seguridad alimentaria, no es más que un capricho o una moda pasajera y sin repercusión alguna para nuestra salud, cuando la realidad es que si un celiaco toma gluten, aunque sea en pequeñas cantidades, sufrirá graves consecuencias, aunque no se observe una reacción negativa inmediata".

Quienes padecen intolerancia al gluten deben hacer frente a "una gran desigualdad" de los precios de los productos de primera necesidad "específicos" de esta diete, ya que el kilo de harina sin gluten puede oscilar entre tres y cinco euros, mientras que el kilo de harina de trigo ronda los cincuenta céntimos.

Fuera de casa

En la lectura del manifiesto, la presidenta de Acefa ha llamado la atención sobre las "grandes dificultades para comer fuera de casa", porque "los establecimientos de comida y bebida no tienen la formación adecuada y suficiente" para atender unas necesidades que "no son nada difíciles de observar", ya que "sólo  se necesitan ganas de hacerlo bien".

"No somos caprichosos ni raros,  no seguimos una moda, sólo queremos cuidar nuestra salud y participar de la vida social como cualquiera", han afirmado, reconociendo que "poco a poco se va creando conciencia colectiva y la enfermedad se va conociendo".

"Cada vez son más los establecimientos que se brindan a atendernos como un cliente más, y no como el 'rarito que no come pan'", han reconocido, a la vez que "muchas marcas se han dado cuenta de que hay un número importante de celiacos y que la dieta sin gluten es cada vez más demandada" por los afectados.

"Como ciudadanos de pleno derecho -ha terminado-, pedimos que se nos escuche y hoy queremos poner en valor que los celiacos sólo reivindicamos un precio justo para nuestros alimentos que son el único tratamiento que hay para nuestra enfermedad, eso y la paciencia".