Fue el 18 de febrero de 1967 junto a Justo García y Emilio de Tomás, otros dos de los homenajeados en una jornada de encuentros entre los sacerdotes de la diócesis.

Nacido en Villanueva del Campillo, el cardenal y arzobispo de Valladolid ha presidido la eucaristía y luego ha ofrecido una conferencia sobre su último libro, 'Memoria y gratitud', acompañado en la mesa por el obispo de Ávila, Jesús García Burillo, y por el futuro obispo de Plasencia, José Luis Retana.

Blázquez ha expresado diversas reflexiones entre sacerdotes de todas las edades: "unos son de ayer, otros somos de antes de ayer", ha bromeado.

Muy distinta

La Iglesia "ha pasado a unas dimensiones muy distintas en estos años", y ha vaticinado que en 20 años "la vida religiosa contemplativa y apostólica en las iglesias va a ser muy distinta".

"Estoy convencido de que no todo son disminuciones. Hay también una vibración con un fervor primero también", ha dicho.

Entre otras anécdotas, ha recordado que el 4 de diciembre de 2014, cuando conducía su coche a su regreso de una misa en una residencia de ancianos de Valladolid, se enteró por la radio de su nombramiento como cardenal por parte del papa Francisco. Aquello -ha reconocido- fue "una sorpresa por el hecho mismo" y porque nadie le había avisado: "pongo la radio a la una y escucho lo que el papa había dicho a las doce, que me iba a crear cardenal. Y yo pensé, ¿pero esto qué es?".

Blázquez ha pedido a los sacerdotes abulenses que sean agradecidos porque "de la gratitud siempre surge el servicio" y ha resaltado la importancia del Concilio Vaticano: "hay que mirar al pasado, pero no con añoranza, sino para valorar aquellos momentos que nos sostienen ahora en el presente".

Ordenación

El cardenal ha rememorado también cuando hace 29 años viajó a Santiago de Compostela para ordenarse sacerdote un 29 de mayo y las palabras que le dijo el teólogo abulense Baldomero Jiménez Duque.

Tras su "entrega y disponibilidad" a la Iglesia, ha explicado que el pasado 13 de abril cumplió 75 años, si bien tardó una semana en enviar la carta de renuncia al Papa ante el nuncio. "Hoy cumplo los años, pero no le voy a firmar la carta porque tengo cosas más importantes que hacer en Valladolid", le dijo al nuncio.

Entre sonrisas de los sacerdotes, el obispo de Ávila, Jesús García Burillo, que en dos semanas cumple 75 años, ha dicho: "yo lo estoy pensando".

En otro momento de la celebración, el obispo electo de Plasencia, el abulense José Luis Retana, ha anunciado que será Blázquez quien le consagre como obispo el próximo 24 de junio.

Homenaje

Los sacerdotes homenajeados al celebrar sus bodas de diamante, ordenados en 1957, han sido: Saturnino Fernández Martínez (Sanchidrián, 1933), jubilado, párroco emérito de Barromán; Juan José Martín Jiménez (Poyales del Hoyo, 1933), jubilado, adscrito a la parroquia de Candeleda; Fabián Moreno Reviriego (Santa María del Berrcoal, 1929), jubilado, párroco emérito de Cepeda de la Mora o Pedro Bernardo, entre otros; Práxedes Serranía Bermejo (Gil García, 1932), párroco de Bernuy Salinero; y Anselmo Rujas Martínez (Madrid, 1932), adscrito a la parroquia de San José Obrero.

También se ha tributado homenaje a los ordenados en 1967: junto a Blázquez; Justo García González (Navarredondilla, 1939), canónigo de la Catedral del Salvador, director de la Oficina diocesana de Peregrinaciones, y párroco de Navarredondilla y San Juan del Molinillo, entre otros; Emilio de Tomás Gutiérrez (Arévalo, 1941), párroco de Villanueva del Aceral y Aldeaseca de Arévalo; José María López (Gotarrendura, 1942), encargado de la gestión del Patrimonio Inmueble de la Diócesis, y durante muchos años director del Colegio Diocesano Asunción de Nuestra Señora; y Víctor Romo Gil (Palacios de Goda, 1943), párroco de Sanchidrián y Adanero.