La larga comitiva ha partido de la Catedral a las 5,30 horas de la madrugada, tan distinta a cuando se celebra, desde hace 64 años, con temperaturas bajo cero, viento o lluvia.

Al pasar por el puente Adaja, el punto más fresco del recorrido, el termómetro marcaba los ocho grados. Con Cristo de los Ajusticiados como enseña, las 14 cruces de madera han marcado las estaciones del vía crucis entre la oscuridad de la noche y las primeras luces del alba.

A pesar de la temperatura benigna, el ritmo del desfile ha sido rápido puesto que el Cristo del Patronato de la Vera Cruz ha entrado en la Catedral a las 7,15 horas.

La Cope, que ha transmitido en directo en cadena el vía crucis, ha cifrado en cerca de 5.000 los asistentes.