El furtivismo -denunciado recientemente por la Alianza UPA-Coag- es el asunto ha que concitado mayor interés en la reunión mantenida en Arévalo por representantes de las tres administraciones con la Guardia Civil, y a la que han acudido 60 alcaldes de La Moraña para recibir información sobre las novedades organizativas por el cambio de sede de la primera compañía del instituto armado, que ha pasado de Ávila capital a la villa morañega.

También los regidores han demandado más seguridad para las construcciones de uso agrícola que no se emplean como residencia, y en las que guardan maquinaria y otros utensilios para labores en el campo, y en algunos casos galgos.

El teniente coronel Carlos Alonso, responsable de la Comandancia de Ávila, ha expresado la necesidad de avisar al 062 de cualquier presencia extraña en el campo, indicando que si bien el número de casos son similares a los de otros años, se ha advertido un cierto aumento de los delitos. El delegado de la Junta. José Francisco Hernández, ha informado de que ya existen varios expedientes abiertos por estos hechos.

Violencia de género

La reunión, celebrada en la Casa del Concejo, ha contado con la presencia del vicepresidente de la Diputación, Carlos García; el alcalde de Arévalo, Vidal Galicia; y la subdelegada del Gobierno, María Ángeles Ortega, quien hizo una especial mención a la violencia contra las mujeres.

Tras el caso de la muerte de una mujer por parte de su esposo en Arévalo hace dos meses, ha hecho un llamamiento a los alcaldes para la rápida asistencia a cualquier solicitud de ayuda en sus municipios o ante indicios de malos tratos a mujeres, y para que de inmediato se avise a la Guardia Civil o a la Policía Local si la hubiere.

La subdelegada ha señalado que estos encuentros con los alcaldes en distintas comarcas tienen como finalidad disminuir la criminalidad en las zonas rurales y mejorar la seguridad ciudadana.