El año pasado, en Castilla y León, se registraron 117 accidentes mortales, de los que 20 se produjeron por velocidad inadecuada. En lo que va de año, en la Comunidad, ha habido 69 accidentes mortales, de los que 17 han tenido como factor concurrente también la velocidad inadecuada.

Por ello, la DGT está señalizando los 300 tramos en España (82 en Castilla y León) identificados como más peligrosos en las carreteras convencionales por los excesos de velocidad y siniestralidad que presentan y en las que, a partir de 80 kilómetros por hora, es “prácticamente imposible que un peatón salve la vida en un atropello”.

Las vías convencionales limitadas a 90 kilómetros por hora son las carreteras donde más se incumplen los límites de velocidad, de modo que los agentes de Tráfico de la Guardia Civil establecerán unos 400 puntos de control de velocidad en Castilla y León durante los días de campaña.

Tramos peligrosos
La campaña incidirá en los denominados Tramos Invive (Intensificación de la Vigilancia de la Velocidad), en los que la DGT ha puesto en marcha un proyecto para su señalización, mediante la instalación de una señal fija que se sitúa bajo la señal vertical de limitación de velocidad del tramo.

En el caso de la capital abulense, estos tramos se localizan en dos carreteras nacionales, tres autonómicas y una provincial.

Así, en la N-110, se localiza un tramo peligroso de 89,44 kilómetros, entre los puntos 262,60 y 352,04 en la vía que transcurre entre San Esteban de Gormaz (Soria) y Plasencia (Cáceres), a su paso por la provincia de Ávila.

También hay dos tramos peligrosos en la N-403, entre Toledo y Martín Muñoz de las Posadas (Segovia): el primero, de 24,47 kilómetros, entre los puntos 140,60 y 165,07; el segundo, de 44,50 kilómetros de longitud, entre los puntos kilométricos 82,97 y 127,47.

Por lo que respecta a las carreteras autonómicas, hay un tramo peligroso en la CL-505, entre Ávila y el límite provincial con Madrid, por Navalperal de Pinares. Tiene una longitud de 40,94 kilómetros y se encuentra entre los puntos 1,08 y 42,02.

Los otros dos tramos se localizan en la CL-501, entre Santa María del Tiétar, en el límite provincial con Madrid, y Madrigal de la Vera, en el límite provincial con Cáceres. El primero de los tramos es de 50,15 kilómetros de longitud y se localiza entre los puntos kilométricos 10,49 y 60,64; el segundo, de 31,10, se sitúa entre los kilómetros 60,64 y 91,74.

También hay un tramo peligroso en la carretera CL-610, de Valladolid a Peñaranda de Bracamonte (Salamanca) por Medina del Campo (Valladolid). Tiene una longitud de 12,53 kilómetros y se localiza entre los puntos kilométricos 70,55 y 83,08.

Finalmente, en la red de carreteras provinciales, la DGT ha identificado un tramo peligroso en la AV-804, de Ávila (N-501) al polígono industrial de Arévalo (CL-601). Tiene 23,85 kilómetros y se sitúa entre los puntos kilométricos 21,07 y 44,92.