García-Margallo, que ha inaugurado la Escuela de Verano que la UCAV y el diario La Razón dedican a ‘Los populismos en el siglo XXI’, ha calificado de “capitales” las próximas elecciones y ha asegurado que la opción populista “no es un fenómeno original de España”, a la vista de lo que está ocurriendo en Francia, Reino Unido o Austria.

A su juicio, los populismos están “de absoluta actualidad”, aunque no son nuevos, pues ya se vivió en Europa tras la Primera Guerra Mundial, cuando “la amenaza de un avance bolchevique” hizo que empezaran a nacer movimientos totalitarios de signo contrario.

El ministro de Asuntos Exteriores se ha referido, igualmente, al “fenómeno” Donald Trump en Estados Unidos, que ha definido como “producto de la resaca, la secuela de la crisis de 2007”.

Sin soluciones
Según García-Margallo, el “problema” es que “los populistas aciertan a canalizar la insatisfacción de gran parte de la población que ha sufrido la crisis, pero no dan soluciones realistas y posibles a los problemas que hay que afrontar".

El ministro en funciones, que ha dado un paseo por el centro de Ávila acompañado por, entre otros, el vicesecretario de Comunicación del PP y cabeza de lista al Congreso por el PP de Ávila, Pablo Casado, también se ha referido a las acciones judiciales que Venezuela ha anunciado contra él y contra el presidente en funciones, Mariano Rajoy.

Legalidad y Maduro son conceptos contradictorios”, ha afirmado, antes de añadir que no le preocupa “gran cosa” la posible interposición de una demanda. “Si quiere aplicar la legalidad, lo mejor que puede hacer es aplicarla en su país”, ha concluido.

Centralidad
Tanto García-Margallo como Casado han paseado hasta la estatua de Adolfo Suárez, en la plaza intramuros que lleva su nombre, y han visitado la tumba del expresidente del Gobierno en la catedral.

Al respecto, Pablo Casado ha recordado que García-Margallo era “buen amigo” del presidente abulense y que ambos tenían “mucho en común en la fundación de la UCD”.

Casado se ha referido a la “centralidad” y la “moderación” como “línea” que quiere seguir el PP de Ávila “para atraer a los votantes” que siempre han confiado en esta formación, pero también “a quienes han dejado de hacerlo o se sintieron traicionados y apoyaron opciones extremistas”.

También el candidato se ha referido al debate a cuatro que tendrá lugar el 13 de junio, sobre el que ha señalado que “son buenos” cuando “se tienen las ideas claras, un proyecto claro y una idea de futuro de este país”, por lo que “el pronóstico es que al presidente Rajoy le va a ir bien”.

De la misma forma, ha pedido al PSOE “que respete la independencia judicial y dé explicaciones”, pues el caso de los ERE ya acumula “más de 200 implicados” y “puede afectar a 3.500 millones de euros de presupuesto público”, aunque “el PSOE no ha pedido disculpas ni dado explicaciones”.

“Que dos expresidentes del PSOE se tengan que sentar ante un juez para explicar el caso más escandaloso de la historia democrática, es algo que debería obligar a Sánchez a dar explicaciones”, ha añadido.

Marca España
Igualmente, Casado ha reivindicado la imagen de Ávila como Marca España, algo que ocurrió con el V Centenario del nacimiento de Santa Teresa, en 2015, a la que se ha referido como “gran embajadora del español”.