Tras el rechazo expresado por varias diputaciones provinciales al proyecto de ordenación territorial, entre ellas, la de Ávila, Herrera ha apostado por el modelo que impulsa la Junta, que ha calificado de “municipalista”.

En el acto de firma, con ayuntamientos y diputaciones, de dos líneas del Plan de Empleo Local, el presidente de la Junta ha afirmado que “determinadas” acciones de su Gobierno pueden “ser criticables”, aunque no admiten “segundas lecturas”.

Según Herrera, es “necesaria” una respuesta “activa y acertada” a la situación, de la misma forma que lo fue, ha recordado, el “premonitorio tsunami” del que alertó la Junta sobre el mapa financiero en Castilla y León.

Así, ha reclamado a las diputaciones –además de la de Ávila, Salamanca y Valladolid también han rechazado la propuesta- que "empujen, impulsen y compartan" el proyecto de ordenación, servicios y gobierno de la Junta desde la premisa de su defensa del "municipalismo”.