A la vez, se ha denunciado a su propietario y a un conductor que los persiguió de forma antirreglamentaria.
La Guardia Civil conoció el hecho al ver una grabación en la que aparecía un vehículo persiguiendo a los animales de manera totalmente antirreglamentaria, y que se difundieron en algunos medios de comunicación.

Tras investigar el caso comprobaron que no se trataba de lobos sino de perros lobos checoslovacos, por lo que los agentes informaron a los vecinos para "calmar la alarma generada" tras la difusión de las imágenes.

Gracias a la colaboración ciudadana se consiguió localizar al propietario de los animales, quien mismos, quien se hace cargo de ellos a la vez que se le denunció por una infracción  administrativa  por falta de control y vigilancia de animales vivos.

Cuando se localizó al conductor del vehículo que aparecía en el video, también se le denunció por comportarse indebidamente en la circulación.