El desbordamiento del arroyo Garoza provocó daños que aún se están evaluando, de la misma forma que continúan las labores de limpieza en la localidad, donde se vieron afectadas unas 65 viviendas de la zona baja del municipio.

Según el regidor de Muñogalindo, la tromba de agua habría provocado pérdidas a las arcas municipales por valor de un millón de euros, al que habría que sumar una cifra similar correspondiente a los daños sufridos por los vecinos.

Zona catastrófica
Pascual ha señalado, en este sentido, que el ayuntamiento estudia solicitar, junto con los consistorios de Santa María del Arroyo y Padiernos y también con la Diputación de Ávila, la declaración de zona catastrófica, lo que deben hacer en el plazo de una semana.

Según el alcalde, el presupuesto municipal es de 300.000 euros al año, por lo que ha solicitado la ayuda de las administraciones ante una situación que sólo recuerda que haya ocurrido otra vez en 1975, aunque ese año las lluvias no dejaron las consecuencias de esta ocasión.

A su juicio, las actuaciones prioritarias deberían pasar por la limpieza del cauce del arroyo Garoza, que ya el año pasado recuperó el propio ayuntamiento con sus medios.