Con dos semanas en el mercado, se trata del primer crossover de la marca del rombo en el segmento C, que se fabrica en Palencia con destino al mercado nacional e internacional. Una parte significativa de las motorizaciones y las cajas de velocidades salen de las factorías de Valladolid y Sevilla, respectivamente.

En la presentación celebrada en la finca Pedrosillo, el director de Comunicación de Renault España, Jesús Presa, ha destacado que el crossover "combina lo mejor del SUV (abreviatura del inglés Sport Utility Vehicle, vehículo todoterreno ligero), el del break y el berlina", ya que ofrece "aptitudes reales de todo terreno, gracias a su excelente  motricidad y a una elevada distancia al suelo", una "modularidad intuitiva y un volumen de maletero al mejor nivel de su segmento (527 litros)"; y "el confort y el bienestar a bordo de un berlina, gracias a los múltiples sistemas de ayuda a la  conducción y a la nueva tableta conectada R-Link 2, que ofrece una conectividad intuitiva y personalizable".

Ha destacado que es "un vehículo muy manejable", con 4,45 metros de largo, 1,84 de ancho y una altura de 1,60, y que comparte el 60 por ciento de las pieza con el Qashqai de Nissan, aunque sólo el cinco por ciento están a la vista.

Buena aceptación

El responsable de Comunicación de la compañía ha destacado la buena aceptación del nuevo vehículo, ya que todavía "no ha habido tiempo para contar con datos de matriculaciones", los concesionarios han registrado "muchísima demanda de información".

Los pedidos se encuentran "por encima de lo previsto en España", por encima de cuando de lanzó el Captur, que era el segundo o tercer vehículo de su segmento.

El Captur "es el vehículo más internacional que tenemos desde el punto de vista de fabricación en España”, y a diferencia del Kadjar, "no está prevista la fabricación fuera de España” y seguirá produciéndose en exclusiva en Valladolid.

En China

Según Presa, la apertura de la primera planta de Renault en China a finales de año o comienzos de 2016, y donde se fabricará el Kadjar para el mercado asiático, no tendrá repercusión sobre la factoría de Villamuriel de Cerrato (Palencia), en la que ahora se produce el nuevo vehículo.

Una de las primeras unidades de este modelo ha hecho la número 15 millones desde la implantación industrial de Renault en España en 1.953. La fábrica palentina se ha modernizado para el nuevo vehículo, con -entre otros medios- el desarrollo de 70 nuevas gamas de herramientas para producir piezas y la instalación de 250 robots de última tecnología para fabricar las bases rodantes.

También se ha instalado una nueva cabina de luz en pintura y se ha doblado el número de horas de formación anuales para la plantilla. De la factoría salen, con dos turnos, 900 vehículos al día.

El Kadjar -con dos motorizaciones diesel y una gasolina- ha salido a la venta con un precio que oscila entre los 19.850 euros, en la versión gasolina Life, y los 28.800, en la diesel 4x4 ZEN.