Así se lo han comunicado representantes de la organización agraria y ganaderos a la jefa del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta en Ávila, Rosa San Segundo.

En el encuentro han solicitado a la Junta "medidas urgentes" que sirvan para "poner fin a esta situación", ya que "la figura del ganadero extensivo se encuentra en peligro".

Para la organización agraria, la Junta tiene que poner en marcha "de una vez por todas actuaciones excepcionales para una situación límite", porque es "evidente" que la presencia del lobo y de la ganadería extensiva en Ávila es "incompatible". Creen que la Administración debe mostrar "preocupación por el presente y futuro del sector ganadero" de la provincia abulense ante una situación "insostenible".

Fuerte presión

A la responsable de Medio Ambiente la han dicho que los ganaderos "no pueden seguir aguantando la presión tan fuerte que a diario ejercen sobre su actividad el cada vez mayor número de cánidos y de estas aves necrófagas asentadas en la provincia de Ávila".

La Alianza UPA-COAG recuerda que al sur del Duero el lobo "no es especie cinegética" y su gestión corresponde "única y exclusivamente a la Junta de Castilla y León", por lo que es la Junta quien debe "asumir el pago de los daños y además el control de la especie".

Entre los asistentes a la reunión se encontraba Raúl de la Parra, ganadero de Baterna, que hace una semana sufrió la pérdida de nueve ternernos en un ataque de cánidos, en el que otras siete reses quedaron heridas. "No podemos seguir así, quien quiera tener lobos que los tenga en una finca, pero no causando los daños que nos está haciendo a los ganaderos", ha manifestado.