Un 5 de junio de 1465, un grupo de nobles castellanos, liderados por el arzobispo de Toledo, Alfonso Carrillo, y entre quienes se encontraban el marqués de Villena y el conde de Plasencia, se reunió a las afueras del recinto amurallado para deponer en efigie a Enrique IV de Castilla y coronar, en su lugar, al infante Alfonso, hermano de la que posteriormente sería Isabel la Católica.

Este hecho histórico, conocido como “la farsa de Ávila”, se recreará el próximo 27 de junio en colaboración con el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua y con la participación de medio centenar de actores aficionados abulenses.

La entrada para la representación, que se realiza por cuarto año consecutivo y que el año pasado tuvo como protagonista a la actriz Silvia Marsó, costará un euro, con el objetivo de donar la recaudación al Banco de Alimentos.

Nuevos personajes
En la escenificación de este año, dirigida de nuevo por Juan José Severo, también el guionista, aparecerán nuevos personajes, como la reina Juana de Avis, esposa de Enrique IV; Beltrán de la Cueva, su supuesto amante, y la infanta Juana, apodada ‘la Beltraneja’.

Para el director del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, Gonzalo Santonja, este episodio histórico supone la conjunción de historia y leyenda, con nombres que se intercalan en la historia como el de Perucho Gómez, un alfarero del barrio de Santiago al que, según reza la leyenda, sacaron de su casa para que realizara el busto del monarca y al que, para que no delatara a los cabecillas de la rebelión, cortaron la lengua.