Según la procuradora Mercedes Martín, "la cesión de servicios abre la puerta a la privatización sanitaria", por un "desmantelamiento del sistema de salud de Ávila por la nefasta política sanitaria del PP, empeñado en acabar con un sistema público, gratuito y de calidad".

Cree que son muestra de "las verdaderas intenciones de la derecha", que es privatización de la sanidad aunque "la excusa de mejorar los tiempos de demora ya no convence y no es creíble al contar con recursos públicos suficientes para dar salida a los retrasos acumulados".

"Lo que hay que hacer es gestionarlos de manera responsable y coherente". según Martín, ya que la externalización "no mejora la respuesta sanitaria a los pacientes y es sólo una puerta a la privatización".

Martín señala que es una ley aprobada en 1997, menos de un año después de la llegada de José María Aznar al Gobierno, la que permitió "abrir la veda de la privatización de los centros sanitarios y ha servido coartada al PP para impulsar recientemente la externalización de seis hospitales en Madrid".

Mejorar la sanidad

Por su parte, IU cree que la cantidad destinada a externalización "debería haberse empleado en mejorar los servicios de la sanidad pública", según el coordinador provincial y candidato a las elecciones autonómicas, José Alberto Novoa.

Este caso "pone en evidencia al Partido Popular, que mantiene plantas y camas cerradas en el Complejo Hospitalario y mantiene las plantillas bajo mínimos", e impulsa con el dinero de todos el negocio de la sanidad privada antes que mejorar la sanidad pública.

"Si existe -añade- una demora en las listas de espera y una reconocida necesidad de atención, lo que debe hacerse es reforzar el sistema público antes que convertirlo en un negocio para entidades privadas". Propone "recuperar el carácter plenamente público de la sanidad y desterrar un modelo que ha convertido la salud de las personas en un negocio de unos pocos".