Alumnos de todas las edades, desde niños con siete u ocho años a los de más de 80 años, son los que exponen sus obras.

Su profesora, Silvia García, destaca de todos ellos que tienen "mucho entusiasmo": "yo soy una herramienta más en la clase, todo el trabajo es de ellos".

"Son más alumnos los que van a pintura, pero han expuesto todos los que han querido", con trabajos de todos los estilos y de todo tipo.

Algunos alumnos, aunque hay una mayoría femenina, llvan acudiendo a estas clases desde hace 18 años, como una forma de "entretenimiento, compañerismo y con ganas de aprender".

No es la primera vez que exponen, porque suelen hacerlo en el Auditorio de San Francisco cuando se celebra la semana cultural. En el Episcopio cada uno ha colgado su mejor trabajo.