En los comicios celebrados el 24 de febrero, UGT obtuvo seis delegados; CCOO, cuatro y Sigen-USO, tres, aunque estas dos formaciones han sumado fuerzas para arrebatar la presidencia a los ugetistas, que han ganado todas las elecciones desde 2003.

De este modo, Rubén Zazo sustituirá al frente del comité a Iván Zazo, que lo había presidido los últimos cuatro años, tras renovar la mayoría de UGT en los comicios sindicales. El vicepresidente de Felipe González Álvarez, de Sigen-USO.

Negociación
El nuevo presidente ha manifestado que su objetivo es continuar la línea de negociación que se había marcado hasta el momento, que pasa por intentar “por todos los medios” que el convenio que se negocia en la actualidad no implique despidos.

Tampoco quieren oír hablar de traslados forzosos, porque podrían suponer más despidos, por la imposibilidad de marcharse de algunos trabajadores.

Zazo ha defendido la “estabilidad” laboral conseguida en los últimos años y ha demandado una mayor carga de trabajo que proceda no sólo de la fabricación de camiones ligeros, como ocurre en la actualidad, sino también de otros productos de la firma.

El nuevo presidente del comité ha señalado que aún no hay fecha fijada para continuar las conversaciones con la dirección, aunque espera que se reanuden esta semana.

Al respecto, ha recordado que los salarios y los datos de absentismo en Ávila son “los más bajos” de Nissan en Europa y que la calidad del producto está “por encima de la media”.

“Si la planta de Ávila no es competitiva es por motivos ajenos a los trabajadores”, ha querido dejar claro.