El can corre, salta y hace cualquier movimiento para lograr atrapar el disco mientras que quien hace de guía también tiene a veces que lograr el equilibrio para estar a la altura de su perro en un ejercicio de compenetración.

En una exhibición y clase de iniciación celebrada en el parque de Las Hervencias en la mañana del sábado, Fernando Calderón, responsable de la escuela Disc Dog Friends For Fun, ha explicado que "según se avanza en la práctica las capturas se convierten en saltos y acrobacias que elevan la práctica a nivel competitivo".

Los españoles "comienzan a despuntar" ganando el campeonato de Europa el año pasado, entre participantes de Alemania, Francia, Estados Unidos y Japón, países donde la afición llegó y caló antes.
Los border collie son los que predominan, pero puede valer cualquier raza: "el mejor es el que ya tienes", asegura Calderón.

La escuela Disc Dog Friends For Fun es una de las primeras de España en enseñar este deporte y aunque la mayoría de sus cursos se desarrollan en Madrid, se dirigen desde Ávila, donde ya celebró una exhición a comienzos de 2013.