A la idea de crear un perímetro de seguridad vial alrededor de los colegios e institutos, solicitan la "reducción y racionalización" del uso del vehículo privado para llevar a los niños a clase.

También proponen potenciar los caminos escolares seguros, con la implicación para su diseño a la comunidad educativa, Ayuntamiento, asociaciones de vecinos y Cámara de Comercio.

Su idea es que para crear rutas escolares peatonales seguras hay que crear "grupos de trabajo interdisciplinares que actúen globalmente", teniendo en cuenta el barrio o la zona donde esté el colegio, y que se haga "de forma simultánea en todos los centros educativos y zonas de la ciudad para que no haya agravios comparativos entre colegios". El colectivo ya se ha reunido con el equipo de Gobierno y los grupos municipales para exponer sus ideas.

Participación
Además de en el asunto del tráfico, también reclaman la participación de las familias en las decisiones de los asuntos relacionados con la educación, “más allá de la representación institucional de la presidencia de la FAMPA”, y solicitan que se les incluya, con voz pero sin voto, en las convocatorias del Consejo Escolar Municipal y el Observatorio Municipal de la Seguridad Vial.