En un acto celebrado en el convento Extramuros, Rufino González, el presidente de la asociación agradeció a los galardonados su “compromiso con Madrigal, con su cultura y su patrimonio” en unos premios que se entregan desde 2009 a “personas, instituciones o colectivos que hayan llevado a cabo labores para el desarrollo, difusión y promoción” de la localidad.

De forma conjunta recibieron el premio los profesores Emilio Rodríguez Almeida, José Luis Gutiérrez Robledo y Francisco Ruiz de Pablos, por su labor para que el convento Extramuros fuese recuperado. Junto a ellos, el grupo folclórico Aires de Madrigal al cumplir 30 años desde que se inició su tarea de difusión de la cultura musical de la localidad, que además pusieron el broche  del acto con música y bailes.

A título póstumo Lucio Garzón Baz (1907-1994) fue reconocido por su labor de tutela de muchos madrigaleños cuando emigraron a los destinos que ocupó como inspector de trabajo en La Coruña, Bilbao y Barcelona.

Una pequeña escultura, obra del artista orensano afincado en Talavera de la Reina Santiago Freijedo, representa el galardón entregado en el acto celebrado el sábado por la noche, y que había empezado con varios niños de la localidad hablando del patrimonio de su localidad.