Por eso quiere que la Administración regional saque a licitación de forma urgente la conclusión de las obras del edificio y su equipamiento y dotación "con el fin de dotar a la ciudad de una residencia universitaria pública moderna y de calidad para los estudiantes universitarios pero también de un albergue para los visitantes" que acudan a la ciudad al centenario.

“La situación de la vieja Residencia Arturo Duperier es insostenible porque está francamente mal conservada”, ha advertido, por "los problemas estructurales de estas instalaciones, que desde hace años padece innumerables averías", además de que no puede utilizarse a la vez como residencia y albergue.

Con albergue
A diferencia, el nuevo edificio cuenta con 150 plazas, unas 90 de residentes y otras 60 de alberguistas, preparado para compatibilizar ambos por estar en dos bloques separados.

Según Vicente, esta residencia es muestra del trato de la Junta hacia Ávila, de relegar sus proyectos, como la Estación de Autobuses y la Residencia de Enfermos Mentales. En este caso acumula tres años.

Con el nuevo edificio, "se incrementaría la demanda de residentes, puesto que pagarían lo mismo que en las antiguas instalaciones pero con unos servicios acordes al siglo XXI y de mayor calidad, en un edificio mejor que el que actualmente ocupa la residencia en la Ciudad Deportiva, que se cae a trozos, literalmente".

La Junta decidió adjudicar la vigilancia del edificio para preservar las instalaciones, que se encuentran casi terminadas pero que no se terminaron porque la empresa entró en concurso de acreedores.