Desde la plaza de San Vicente irá al Mercado Grande y luego a Santo Tomás, para llegar al Convento de La Santa y dirigirse a los Cuatro Postes y a la Encarnación, regresando al punto de partido. Estiman una duración del recorrido de 35 minutos.

Los viajeros podrán optar por dar una vuelta (3,95 euros) o por un billete de 'sube y baja' en cualquiera de las paradas durante 24 horas (5,9 euros), según ha explicado Daniel Dávila, representante de la compañía adjudicataria, Ávila Trainvision, fruto de una unión temporal de tres empresas.

De color rojo y blanco, el vehículo de nueva fabricación ES "panorámico, también el techo", va propulsado a gas natural, con 250 caballos, tracción automática a las cuatro ruedas, sistema de seguridad SP y "las puertas no pueden abrirse en marcha, ya que el estribo se eleva para evitarlo", según ha explicado Rafael Jiménez, director, quien ha destacado que cuenta con prestaciones de las que carecía su antecesor, el Murallito.

Con dos vagones, dispone de 56 plazas, con dos lugares para discapacitados en la parte de atrás. El recorrido permite ser seguido en cuatro idiomas por auriculares (un euro) gracias a un GPS.

Segundo tren
"Ya se está fabricando, un trabajo artesanal" un segundo tren para que se incorpore en los próximos meses, según han destacado Dávila, socio de la empresa, que ha creado cuatro puestos de trabajo, antes comenzar a funcionar, a última hora de la mañana del viernes.

El tren funcionará todos los días del año, incluso en invierno. La empresa cuenta con trenes turísticos similares en Toledo,  Ayamonte (Huelva) y Torrevieja (Alicante), y autobuses en Madrid y en Nueva Orleans (Estados Unidos).

La puesta en marcha del tren se produce con un retraso de dos meses y medio, ya que el Ayuntamiento anunció que funcionaría a comienzos de año.