Hay grupos fuertes que están contra las nucleares o construir presas, que son las que producen electricidad a un precio muy económico.

Conviene que tengamos una apreciación real de las centrales nucleares, que no tienen nada que ver con la bomba atómica. En China están construyendo 50 centrales nucleares pues no hacen caso a los extremistas y en Francia tienen 50 en funcionamiento y siguen
construyéndolas.

Sobre las nucleares y los tres fracasos que ha habido se debe analizar sus causas, ya que el último caso, Fukúshima, es porque los técnicos japoneses las colocaron haciendo de muro al mar, a los fuertes oleajes: lo que no comprendo, pues es de idiotas construir así sus centrales nucleares para un oleaje de unos seis metros de altura cuando estos días en España tenemos olas de 12 y más metros de altura. Chernóbil fue causado por el desastre de organización de la entonces Unión Soviética y su ahorro en seguridad al no construir una fuerte cubierta como hacían todos y que hubiera impedido que saliera al exterior radiación alguna. Lo de Three Miles Island fue un error humano, pues el tripón del vigilante le impidió ver una señal del peligro; algo parecido a lo del Alvia, que no hubiera ocurrido si alguien hubiera pensado normalmente, no sólo técnicamente, y hubieran puesto una señal barata unos dos kilómetros antes de la curva, algo que se le ocurre a un niño de 10 años.

En cuanto a las presas, los grupos que están contra ellas lo hacen por defender el hábitat de algún conejo o alacrán, a mi modo de verlo, pero me parece que en realidad es por creer que fue un invento de la dictadura, pues España despegó industrialmente por la construcción de muchas presas que suministraban electricidad barata; entonces España llegó a ser el tercer país del mundo en número de presas detrás de Estados Unidos y Japón.

Veamos los molinos de viento. Se empezaron a construir en la época de Zapatero. No sé por qué pagaban por un solo molino de viento y año un precio mayor que el valor de toda una hectárea y en cada hectárea se podían levantar varios de esos molinos.

Un caso: a unos familiares les iban a plantar tres molinos de viento y les daban 6.000 euros al año por cada uno; estaban muy contentos y no entendían por qué les daban tanto dinero; pero antes de que los construyeran perdió la partida Zapatero y el nuevo gobierno ha parado tan excesivas subvenciones. Me han mencionado que el contrato por poner los caros molinos es por 30 años, lo que me parece una incomprensible carga para los españoles pagadores de impuestos. Estas subvenciones sin lógica fueron hechas sin un regateo con los propietarios de los terrenos ¿por qué razón? Resulta que en esos 30 años, y si instalan tan solo dos molinos de viento en una hectárea, se habrá pagado al propietario más de 60 veces el valor de la hectárea: la ruina para Hacienda solucionada por los que pagamos impuestos.

En cuanto a los parques de paneles que captan la luz solar parece que las subvenciones también eran excesivas, de derroche. Hay uno que veo con frecuencia y ya tiene varios paneles descansando, o sea, sin seguir el movimiento del sol.

Es necesario que se revise el muy excesivo canon anual por cada molino de viento, y en cuanto a los paneles solares considerar que el robo del cobre de sus instalaciones tenga un gran castigo, y si es hecho por personas de otros países expulsarlos y declararlos personas non-gratas.

Se debe investigar más el aprovechamiento de la energía de las olas del mar y de las mareas que son energías renovables, tema que prima hoy en día.

Las centrales que queman combustibles deben irse reduciendo a medida que se vayan construyendo más presas o más centrales nucleares. De las que queman carbón se deben aprovechar al máximo los hollines, material en el que tengo varias tesis y trabajos científicos para hallarlos usos, lo que tengo recogido en seis libros en inglés, que se presentan en el gráfico, y en uno de 450 páginas en español.

Un tipo de hollines que descubrí era un verdadero cemento, que mi universidad no quiso patentar,  y se está usando en Estados Unidos por millones de toneladas al año; por ello contribuyo a evitar que vayan a la atmósfera millones de kilos al año del peligroso anhídrido carbónico, causante del cambio climático. VER PUBLICACIONES DEL AUTOR.