En total, según la organización, dos millares de personas, entre estudiantes, profesores, miembros de las comunidades escolares y asociaciones arevalenses, han secundado la llamada de la campaña contra el hambre que organiza cada febrero la organización no gubernamental Manos Unidas, siendo esta vez la edición décimonovena.

Este año, los fondos conseguidos gracias a la colaboración y solidaridad de los niños y adolescentes de los colegios, junto con las comunidades educativas, irán a parar a un proyecto de instalación de cocinas sin humo, depósitos de agua de lluvia, cocinas solares y de heno el sur de la India. Un proyecto del que se beneficiarán unas 15.000 personas directamente y que tiene un presupuesto de 50.000 euros.

A los participantes, a cambio de su aportación económica, se les daba bocadillos preparados por voluntarios anónimos pertenecientes a las asociaciones de padres de los colegios participantes y asociadas de María Auxiliadora.

Han sido bocadillos elaborados con kilos de chorizo y salchichón, pero sobre todo, con las casi 200 tortillas de patata llevadas por las asociaciones de amas de casa y muchas otras donadas por algunas asociaciones de madres y padres de alumnos.

Además, también  empresas como Casbega y Quimicel participaron en tan solidario evento, donando parte de sus productos para que el gasto económico sea menor y mayor así la aportación al proyecto caritativo.

La Operación Bocata también se celebrará el próximo martes en el Colegio de Educación Infantil y Primaria Juan XXIII, de Fontiveros, donde la Asociación de Padres y Madres de Alumnos prepara y dona los bocadillos que los alumnos comerán en esa jornada solidaria.