El condenado, Ricardo G.G., que nació en Ávila en 1989, inició en agosto de 2013 la tramitación de la petición de indulto “total o parcial” sobre la condena de 20 años y ocho meses de prisión impuesta por la sección tercera de la Audiencia Provincial alicantina, que luego ratificó el Tribunal Supremo.

El expediente incluyó sendos escritos de la fiscalía, el centro penitenciario salmantino de Topas, donde está recluido, y de la acusación de la viuda y huérfana, que coincidieron en pronunciarse en contra de la solicitud.

La paliza ocurrió sobre las 7 horas del 26 de noviembre de 2008 en el turístico paseo de la playa del Postiguet cuando, como todas las mañanas, la víctima, de 43 años, se dirigía a trabajar a la sede de la Agencia Tributaria.

Ricardo G.G. siguió al funcionario y le propinó una “brutal agresión” con puños y patadas tras atacarle por la espalda y robarle la cartera.