Lo ha dicho en un encuentro ante una treintena de potenciales business angels donde ha contado algunas inversiones que ha realizado en los últimos tres años, y donde ha destacado este modo de crear empresas en un momento en el que los bancos “no dan dinero”.

¿Qué es un business angel? “Es empresario que tiene unos ahorros y los pone a disposición del emprendedor, pero no sólo los ahorros, sino su experiencia, momento en el que entra en juego el concepto smart money, el dinero inteligente”, ya que “no sólo queremos que el inversor ponga su dinero sino también su experiencia y que ayude al emprendedor”.

Miembro de la red de inversores privados de IESE Business School y profesor colaborador del Departamento de Emprendedores de la Escuela de Negocios de la Universidad de Navarra, Sánchez Tejado ha compartido su experiencia en el mundo de la inversión en el marco del programa ÁvilaBan, que busca poner en contacto a inversores con emprendedores, además de formar inversores.

Alto riesgo
“No hay que olvidar que inversiones de estas características son de alto riesgo y que es muy difícil hacer arrancar una empresa”, ha explicado.

No obstante, ha considerado que hay dos factores “fundamentales” a la hora de invertir, como es el equipo, porque “el dinero se invierte en personas, y si no te gusta la persona o el equipo, no inviertes”; y en segundo lugar “que el modelo de negocio sea coherente, no se invierte en un producto ni en una idea, sino en un modelo de negocio”.

Sánchez Tejado ha incidido en que el emprendimiento “está cambiando” en España, de la misma forma que lo ha hecho en Estados Unidos, donde es un fenómeno que lleva “20 años de recorrido”. “Es un fenómeno cultural que va a cambiar España, nos hace más proactivos”, ha apuntado.

Fracaso del emprendedor
“Y no debemos estigmatizar a un emprendedor porque tenga un problema, porque haya tenido un fracaso, al emprendedor hay que juzgarle por el número de veces que se levanta y no por el número de veces que se cae”, ha manifestado, y ha pedido “cambiar esa mentalidad”.

“En América, al emprendedor que ha fracasado se le considera una persona que ha adquirido experiencia, que ha aprendido”, porque “la mejor universidad es la adversidad”. “Alguien que ha fracasado está aprendiendo y hay que valorar mucho a los emprendedores, y si caen, ayudarles para que se vuelvan a levantar”.

Como inversor privado, Sánchez Tejado también ha puesto su experiencia en negocios “de todo tipo”, como un proyecto en Andalucía de tecnología para el campo de la seguridad que ha creado 25 empleos y que abrirá una fábrica en Sevilla para crear otros veinticinco, todos ellos de “alto nivel” para trabajar en I+D.