La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha dado la razón al diputado provincial, concejal de UPyD y funcionario de carrera del Ayuntamiento de Las Navas del Marqués en su demanda por no haber percibido los complementos como empleado.

Martín Rosado explica que cuando hizo pública su intención de aspirar a la alcaldía al frente de la lista de UPyD, el regidor, Gerardo Pérez, le cesó mediante “resolución verbal” en sus funciones administrativas que prestaba desde hace diez años para la empresa pública Montes de Las Navas SA.

Por tanto, el funcionario dejó de percibir el complemento de productividad asociado a tales funciones. Tras recurrir la decisión, fue favorable en primera instancia y confirmada por el TSJ, que obliga al Consistorio navero a reintegrar al trabajador en sus funciones y a pagarle las retribuciones que dejó de percibir hasta que fue elegido concejal, que fue el período comprendido entre enero y mayo, y cuya cantidad es de 3.022 euros.

Según explica Martín Rosado, “la sentencia deja claro que el Ayuntamiento de Las Navas, y en concreto el alcalde, actuó de forma unilateral, sin ningún tipo de motivo ni justificación para apartarme de las tareas administrativas en Montes de Las Navas, privándome así de un complemento de productividad de 500 euros mensuales, algo que el alcalde decidió nada más saber que me iba a presentar a las elecciones municipales”.

Segunda sentencia
Se trata de la segunda sentencia en contra del Ayuntamiento, que fue condenado en junio a pagar las cuotas de la Seguridad Social del funcionario durante su excedencia laboral por desempeñar un cargo público.

Por otra parte, el edil y diputado provincial de UPyD se encuentra pendiente de la denuncia que presentó contra él una concejala del PP, que le acusa de varios delitos, entre ellos el de apropiación indebida, acusándole de haberse quedado con dinero cuando él era secretario de la Asociación Musical de Las Navas y ella presidenta. Martín Rosado acudió en junio al juzgado para sometese a una prueba caligráfica.