Se trata de un joven portugués de 26 años de edad cuando circulaba por la autovía, donde la velocidad máxima es de 120 kilómetros por hora.

Fue el lunes cuando fue detectado en un control de velocidad situado en el kilómetro 69,3 por agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Salamanca, quienes avisaron a sus colegas de Ávila para localizar al conductor, que iba al frente de un vehículo Bentley modelo 3W.

Los agentes le imputaron el delito y, tras la instrucción de las diligencias judiciales, fue citado para la celebración de un juicio rápido en Ávila.

La Guardia Civil ha recordado que el artículo 379 del Código Penal dice que quien condujere un vehículo a motor o ciclomotor a velocidad superior en 60 kilómetros por hora en vía urbana o en 80 en vía interurbana a la permitida será castigado como autor de un delito contra la seguridad vial.

El pasado día 9, la Guardia Civil imputó a un conductor que viajaba por la misma autovía a 211 kilómetros por hora, lo que infringía el Código Penal, pero es que además tenía una prohibición médica de no superar los 100 kilómetros por hora.