De esa cantidad, 400.000 euros podrían conseguirse reduciendo las cantidades que perciben ediles y asesores, y otras 120.000 no creando dos nuevas plazas que contempla el equipo de Gobierno, como son la de viceinterventor y la de coordinador de recursos humanos, según la portavoz popular, Sonsoles Sánchez-Reyes, quien ha explicado que tienen razones de sobra para presentar una enmienda a la totalidad, pero como sería rechazada prefieren “aportar enmiendas concretas que tengan alguna posibilidad de salir adelante”.

“Estas cuentas merecen un rechazo total porque no contemplan ayudas para sectores estratégicos de la ciudad que están sufriendo especialmente la situación económica causada por la Covid-19”, ha criticado. “No hay ayudas directas para el pago de tributos municipales, para hosteleros, comerciantes y autónomos,  ni ayudas nuevas y específicas ajustadas a la crisis para luchar contra el desempleo que crece y crece en nuestra ciudad”, ha lamentado.

“No vamos a dejar de esgrimir la partida de sueldos políticos, que está muy inflada y hay demasiados liberados que suponen un gasto muy superior al que ellos heredaron de la anterior corporación”, ha dicho, porque es “un gasto exagerado desde el primer día de este mandato, pero en el actual contexto de crisis es aún mucho menos justificable”.

Las enmiendas parten de la idea que “el Ayuntamiento debe estar centrado en la economía ante un contexto como el que tenemos”, ha dicho, criticando al alcalde, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, “que no es autoridad sanitaria aunque se pase la vida recomendando o abrir o cerrar [Castilla y León] según le apetezca ese día”.
“El alcalde tiene que abordar sus responsabilidades competenciales y trabajar ante el momento más complicado de nuestras vidas”, y en el que “para muchísimos abulenses es la hora en que el Ayuntamiento tiene que estar volcado en ayudar”.

Asignaturas pendientes

El concejal Mario Ayuso ha criticado, por su parte, que el proyecto de presupuestos “ha llegado con más de tres meses de retraso y lo han presentado arrastrando a este ejercicio, nada más y nada menos, que seis millones de euros del ejercicio pasado que no han ejecutado cuando correspondían a 2020”. “Es decir, que comienzan 2021 tarde y con muchas asignaturas pendientes”, en lo que es “una especie de auto herencia recibida”.

Por un lado, el PP propone destinar más de 600.000 euros en ayudas a los sectores que más están sufriendo la crisis, como 200.000 en ayudas al empleo estable, que fueron eliminadas en mayo pasado; 100.000 en ayudas específicas para la creación de empleo; y otras 100.000 en líneas de ayudas para bonificaciones tributarias municipales, como IBI, tasa de basuras e impuesto de vehículos destinadas a hosteleros, comerciantes y autónomos que “han tenido que cerrar o reducir aforos y horarios, y que han visto bajar mucho su facturación durante este período”. También incrementan hasta los 100000 las campañas para el comercio local destinados a “bonos que incentiven el consumo en hostelería y comercio”.

También proponen aumentar las ayudas a Cáritas y Cruz Roja como organizaciones “que trabajan incansablemente para atender a mucha más gente de la ciudad en este periodo de crisis”; una partida para los afectados del cierre de Idental, ya que tras aprobarse una moción en noviembre de 2019 no se ha facilitado ayuda alguna; incrementar de 44.000 a 109.000 euros la aportación al Consejo Municipal de la Discapacidad, que “han alertado de enormes dificultades para mantenerse con la crisis”; y llegar a 25.000 euros para ayudas a los clubes deportivos.

Otras propuestas son las de aumentar de 120.000 a 200.000 euros la partida dedicada a instalaciones deportivas, y otra para ampliar el horario de las bibliotecas municipales.

Entre los apartados que el PP quiere eliminar o reducir su importe se encuentran los “publicidad y propaganda”, la externalización de trabajos o los servicios postales.