La directora general de Calidad y Evaluación Ambiental, Guillermina Yanguas, y un representante de la Fundación Biodiversidad han recibido un pendrive con más de 142.000 firmas recogidas en los últimos meses -a través de la plataforma de internet Change-, desde que la Diputación aprobó la declaración presentada por UPA para declarar la provincia “libre de lobos”.

“Queremos agradecer al ministerio que haya querido escuchar a las decenas de miles de personas que se han movilizado en los últimos meses para proteger al lobo en Ávila”, ha manifestado el naturalista Luis Miguel Domínguez, presidente de Lobo Marley.

“Sin embargo, no podemos decir que estemos satisfechos con la reunión, porque el ministerio no se ha comprometido a solucionar esta situación”, ha dicho, a la vez que ha anunciado que el martes acudirán a Valladolid a entregar las firmas ante la Junta de Castilla y León, al igual que irán al Parlamento Europeo.

Exterminio
Según Domínguez, declarar la provincia abulense como libre de lobos “significar el exterminio de la especie”, y considera que la declaración de la Diputación y de numerosos ayuntamientos es “ilegal”.

“Algunas de las subvenciones recibidas por estos sindicatos establecen unos requisitos medioambientales entre los cuales se encuentra la protección del lobo”, y apunta que la directiva de la UE 92/43/CEE “establece una protección estricta del lobo al sur del Duero por ser una especie prioritaria para alcanzar el estado de conservación favorable del hábitat”.

“Y si esa expansión natural -añade- genera conflictos, hay que buscar el equilibrio, pero pretender eliminar todos los lobos de una provincia es una irresponsabilidad y un disparate”.