Ni la crisis sanitaria, social y económica ha logrado que los grupos municipales en el Ayuntamiento de Ávila hayan rebajado el tono en el pleno de ordenanzas fiscales. Muy al contrario, la sesión telemática ha vuelto a poner de relieve el clima de crispación, especialmente entre Por Ávila y PP, que han vuelto a intercambiar duros reproches sobre el pasado común de algunos de sus integrantes.

Lo fundamental, y sobre lo que se ha hablado lo justo, es que la propuesta de ordenanzas fiscales que planteaba el equipo de Gobierno, integrado por Ciudadanos y Por Ávila, ha salido adelante con el voto favorable de los dos socios de gobierno. PP y PSOE, a los que el portavoz de la formación naranja, Carlos López, se ha referido como PPSOE, han votado en contra.

Pala para enterrar

La portavoz del PP, Sonsoles Sánchez-Reyes, ha calificado las ordenanzas de "nefastas" y "una pala para enterrar Ávila", ya que a su juicio, el hecho de "no variar la carga impositiva, es no querer adaptarse a la realidad" derivada de la Covid-19.

"Van a agravar la situación económica y social de Ávila", ha sostenido, y ha llegado a decir que existe "riesgo" de "impagos", ante la complicada situación económica que pueden sufrir algunas familias.

Ayudas

Por su parte, la portavoz municipal del PSOE, Yolanda Vázquez, ha señalado que su propuesta no incluía bajada de impuestos, ya que entiende que el Consistorio tiene que tener los suficientes ingresos como para dar servicios; sin embargo, sí ha planteado la necesidad de destinar subvenciones a aquellas familias que, por su complicada situación económica, no puedan afrontar el pago del IBI, del agua y otros impuestos y tasas.

"Las campañas están bien, pero las ayudas son mejores", ha sostenido, después de haber criticado el contenido de las ordenanzas, por entender que son "un puñado de cambios técnicos" que contienen "mucha fachada y poco fondo".

Plan Territorial de Fomento

Estas críticas se han producido después de la defensa realizada por la teniente de alcalde de Servicios Sociales y Hacienda, Ángela García Almeida, quien ha vuelto a insistir en que se trata de unas ordenanzas vinculadas al Plan Territorial de Fomento Industrial de la ciudad, dotado con 34,5 millones de euros hasta 2024.

En su intervención, ha señalado que se trata de unas ordenanzas "enfocadas a la generación de empleo y la reactivación económica", en línea con el Plan de Fomento y el Acuerdo Marco de Reactivación.

Tras destacar las "bonificaciones" en impuestos y tasas para empresas que generen empleo, ha rechazado la propuesta del PP de rebajar impuestos porque "no hay margen" y la situación actual "no da para más", ya que los ingresos han caído en lo que va de año 2,3 millones de euros, mientras que los gastos derivados de la pandemia han aumentado en un millón de euros.

“A pesar de lo anterior, gravámenes como el IBI, la recogida de basuras o el impuesto de vehículos de tracción mecánica se congelan”, ha subrayado la responsable económica.

En el mismo sentido se ha expresado, en nombre de su socio de gobierno, el portavoz de Cs, Carlos López, quien ha hablado del desfase de 3,5 millones de euros en las cuentas públicas municipales por las consecuencias de la Covid-19 y ha apelado a la unidad para aprobar los Presupuestos de 2021.

Clima de tensión

El clima de tensión se ha producido tras las intervenciones de Sánchez-Reyes y del portavoz de Por Ávila, José Ramón Budiño, que ha tachado al grupo del PP como “populares populistas”, antes de preguntarles dónde está la parte de sus sueldos que dieron que iban a donar para combatir la pandemia.

Después de que Sánchez-Reyes reprochara al Gobierno municipal que “la cercanía es preocupación por los abulenses” y que la petición de propuestas a los colectivos ciudadnos ha sido “otro artilugio para desviar la atención de lo importante”, Budiño ha vuelto la vista atrás, para señalar que el anterior mandato fue “el más nefasto de la historia de este Consistorio”.

“Produce sonrojo que, lejos de pedir perdón, continúen con esa deriva política. Por eso están en la oposición”, ha añadido, antes de seguir en la misma línea aludiendo a las “luchas de poder y de egos” en el seno del PP, rindiendo “pleitesía” a “la mano que mece la cuna”. En este sentido, ha llegado a hablar de “apesebradas cunas”.

Carlos López no le fue a la zaga, después de que la portavoz popular se hubiese referido a los dos concejales de Ciudadanos señalando que “se autoconceden cosas”, ya que a su juicio, al estar en el gobierno municipales “se piden cosas que luego aprueban”.

López ha reprochado a Sánchez-Reyes que, tras haber formado parte de la corporación anterior, “podría haber contribuido a crear unas ordenanzas mucho más sociales”. Además, ha señalado que “la situación económica del Ayuntamiento proviene de una mala gestión suya”.

Sánchez-Reyes, además de señalar que Albert Rivera defendió que no se subieran impuestos, también le ha recordado a López que su grupo votó “a favor” del anterior gobierno municipal, del PP, cuando su actual concejala, Julia Martín, también formaba parte de aquel grupo.

Partidos amortizados

Pero los reproches más significativos han llegado por boca del portavoz de Por Ávila y presidente de esta formación dirigiéndose a PP y PSOE como “binomio populista”, con propuestas “populistas” con “brindis al sol”.

“Están amortizados en sus partidos políticos, créanlo”, ha llegado a decir Budiño, en referencia a los concejales de PP y PSOE, para después decirles: “Aunque sean pajes, sean libres”.

Volviendo la vista atrás, ha explicado el origen de su marcha del PP, junto al actual alcalde y entre otros: “Se rompió por nosotros”. Al respecto, ha añadido que Sánchez Cabrera podía haber sido “eurodiputado” y él “asesor en cualquier sitio”, si hubieran aceptado las condiciones que les pusieron para continuar en el PP.

Al margen de los reproches cruzados entre Por Ávila y PP –también Cs-, la portavoz socialista, que ha tenido un desencuentro con el alcalde al no decir bien su nombre, ha reprochado al Gobierno municipal que “no les importe la economía de las familias de Ávila”. Además, les ha pedido que “no estén todo el día en modo plañidero”.