Así lo ha dicho el presidente de la Diputación, Carlos García, al afirmar que de los resultados del  plan se espera que “sitúen en vanguardia lo que debe ser un desarrollo industrial”. Y “establezca lazos tangibles e intangibles entre la provincia y la capital, entre nuestros productores, nuestra agroindustria, y el desarrollo industrial y tecnológico necesario para abrir mercado y generar  valor añadido para sus productos”.

“Esa esperanza para Ávila no ha surgido en una mañana” porque “en política las casualidades no existen”, ha dicho, a la vez que ha destacado “el empeño de la Diputación” y ha asegurado que “pueden beneficiarse todos los productores de la provincia en el medio y largo plazo dentro de una perspectiva provincial”.

García ha subrayado “el compromiso presupuestario de la Junta”. Con 34,5 millones de euros, la Junta aporta 26, el Ayuntamiento de la capital 6,5 y dos la institución provincial. 

Y ha destacado que ha salido adelante en un “tiempo récord” porque es “heredero de un plan que empezó a forjarse hace cuatro años” con la contribución de los agentes sociales y “decenas de líneas de actuación”, en lo que fue “por primera vez una dinámica de participación en la toma de decisiones políticas”.

Mañueco

Así se ha referido el Plan Ávila 2020 aprobado en octubre de 2017, y ha recordado que “sólo se desarrolló parcialmente y no ncontró en su momento apoyo institucional fuera de Ávila”, lo que ahora sí ha ocurrido en el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.

A pesar de “los errores de aplicación práctica”, ha dicho el presidente, ha destacado “las denominaciones de origen, las marcas de calidad y la oficina de captación de inversiones”.

García, sin citar a Por Ávila, ha criticado que sus representantes hayan dicho que han tenido un papel destacado en el actual plan y les acusado de practicar “el adanismo político” y de “lanzar la falacia de 'antes de mí, la nada”, antes de solicitar “un mínimo de justicia”.

Aparte del plan, ha asegurado que existe “el compromiso” de la Junta para “mejorar las infraestructuras de todos y cada uno de todos los polígonos de la provincia”.

Entre los portavoces, el de Ciudadanos, Pedro Cabrero, ha significado la importancia que tendrá el plan, y lo agradecido a los responsables de la Consejería de Empleo e Industria, que son de su formación, entre ellos al exconsejero, Germán Barrios. Mientras que el portavoz de Por Ávila, Alberto Encinar, ha deseado que el plan suponga “un antes y un después para Ávila”.

Por su parte, el portavoz socialista, Pedro Muñoz, ha dicho que ellos no podían votar así el plan, por  eso exigieron un compromiso de la Junta para apoyar la industrialización en las localidades donde hay polígonos en la provincia, que ha sido formulado por el viceconsejero de Economía y Competividad, Carlos Martín Tobalina.

Las tres mociones aprobadas

El pleno de julio de la Diputación abulense ha aprobado las tres mociones debatidas, dos de ellas por unanimidad. Las tres propuestas han versado sobre el incremento de las plazas de secretarios e interventores (PP), financiación a los ayuntamientos del sobrecoste de la limpieza de los colegios debido a la pandemia (PSOE) y permitir a las entidades locales invertir su superávit sin condiciones (Por Ávila).

Las dos primeras propuestas han salido adelante por unanimidad. Así, la moción del PP se ha aprobado al coincidir los grupos políticos en la conveniencia de aumentar la oferta pública de empleo relativa a los técnicos de habilitación nacional.

En el caso de la moción del PSOE, ha sido consensuada ante la necesidad de que las entidades locales afronten con garantías el inicio del curso escolar en lo relativo a la limpieza y mantenimiento de los colegios. Al texto original se ha añadido instar al Gobierno a acelerar las transferencias de fondos a las comunidades autónomas para que éstas cuenten con recursos.

Y la iniciativa de Por Ávila se ha aprobado tras aceptar el proponente una transaccional del PP con críticas al Gobierno por su fórmula para posibilitar a los ayuntamientos utilizar sus remanentes de tesorería e instándole a variar su postura. El Grupo Socialista pidió retirar del texto las expresiones con mayor carga política y limitarse al fondo de la moción, pero sin éxito, de ahí su abstención.

En la parte de ruegos y preguntas, el portavoz del PSOE, Pedro Muñoz, planteó que los plenos de la Diputación vuelvan a ser presenciales a partir de septiembre, ya que en agosto no se celebra, para que los diputados provinciales siguieran su desarrollo con todas las garantías, sin el riesgo de fallos técnicos que conllevan las sesiones telemáticas.

Telemático con invitados

El presidente de la Diputación, Carlos García, contestó que se analizará la propuesta y el portavoz de Por Ávila, Alberto Encinar, subrayó la disposición de su grupo a analizar el ruego socialista.

El pleno de julio, celebrado este lunes, ha sido distinto, pues si bien presidente y portavoces estaban en el salón de sesiones, y el resto de diputados se han conectado telemáticamente, como en los últimos meses, sí que habido invitados. Han acudido el presidente de Confae, y los secretarios de UGT y CCOO, Juan Saborido, Javier Hernández y Óscar García Barroso, respectivamente, para ser testigos del visto bueno de la Diputación al Plan Territorial de Fomento de la Junta.