“Si llevamos 14 días sin casos podemos pasar a la fase 1”, ha afirmado: “Si ya hemos pasado de fase y aparecen unos casos pero los podemos vigilar y aislar, no va a ser problema, el problema es que tengamos todavía muchos casos”, ha señalado, destacando que Castilla y León aplica criterios !muy exigentes”.

Tras superar la fase actual “tenemos que estar muy vigilantes para que, si aparece uno nuevo, poderlos aislar inmediatamente”.

La consejera ha explicado que Ávila sí que cumple los criterios de dotación de camas hospitalarias (entre 1,5 y dos camas de UCI por cada 100.000 habitantes, y de 27 a 40 en planta), porque, igual que ha ocurrido durante los momentos de mayor necesidad, la Unidad de Cuidados Intensivos puede ampliarse. La UCI cuenta con ocho camas estructurales, pero la denominada UCI extendida eleva a 19 plazas, añadiendo por otra parte las ocho de la Unidad de Reanimación (REA).

También se dispone más camas con la posibilidad, gracias al acuerdo con la Subdelegación del Gobierno, de instalar 200 más en el pabellón deportivo de la Escuela Nacional de Policía.

Según la consejera, el caso de Ávila es un ejemplo: “lo que nos ha pasado, sobre todo en los hospitales pequeños, es lo que nos hace una reflexión sobre una nueva planificación del sistema sanitario y una  mejor diferenciación de áreas polivalentes que nos permitan crecer en un momento determinado si nos encontramos en la situación que hemos vivido”.