Por ello, los vecinos de Santiago de Aravalle en colaboración con el Ayuntamiento de Puerto Castilla, municipio al que pertenecen, han elaborado un original nacimiento en el que se recrean diversos monumentos de este pequeño pueblo.

La iglesia parroquial y su torre, que son monumento BIC, el pilón de la plaza, el molino que dio servicio a esta zona durante muchos años o algunas de las casas más representativas del pueblo forman parte de este belén en el que no faltan, por supuesto, los Reyes Magos, el castillo de Herodes o el portalito con la Virgen, San José y el Niño, alumbrados por cientos de luces.

Todo ello colocado alrededor de la espectacular figura que el escultor vallisoletano Lorenzo Duque ha donado al pueblo, en agradecimiento a que éste le ha regaló varios troncos secos de castaños centenarios con los que él elabora vistosas esculturas, una de ellas es la que ocupa desde el verano el lugar del mítico álamo que durante siglos fue testigo de los avatares de los santiagueños. 

Además, han iluminado el magnífico acebo situado enfrente de  la torre y que compite con ésta en llegar a lo más alto. Todo un símbolo de esperanza que los “migueletes” quieren seguir manteniendo año tras año.