La sala ha estimado parcialmente el recurso de la condenada y ha rebajado la condena de 21 a 16 meses la pena de prisión que le había sido impuesta el Juzgado de lo Penal número 1 por sendos delitos de lesiones en el ámbito familiar.

También le condena a indemnizar a su ex con 275 euros por las lesiones que sufrió, le prohíbe acercarse a él a menos de 100 metros y comunicarse con él durante tres años y nueve meses. 

Según el relato de los hechos probados, en septiembre de 2016, la mujer se dirigió al lugar donde trabajaba su expareja y, “como quiera que iniciaron una discusión entre ambos, en un momento dado de la misma, la acusada, con ánimo de menoscabar la integridad física le propinó una patada en los testículos, así como diversas patadas y puñetazos”.

El agredido sufrió lesiones como “contusión testicular y eritemas en la espalda”, que necesitaron asistencia facultativa, y tardaron en curar seis días, uno de ellos de baja.

Dos semanas después, la condenada acudió a un bar donde él tomaba un café: “entró en el citado establecimiento y con ánimo de menoscabar la integridad física le ha arrojado el café que estaba tomando, y se encontraba caliente, a la cabeza y a los ojos, dándole posteriormente con la taza en la cabeza”. Los hechos fueron presenciados por la hija menor de edad de ambos.

El agredido sufrió un eritema facial, que precisó asistencia sanitaria y tardó en curar cinco días, uno de ellos de baja.

La condenada no deberá cumplir la pena al carecer de antecedentes penales.