Dentro del Plan Mayor Seguridad, al encuentro acudieron directores de bancas y cajas con oficinas en la capital abulense, como son Bankinter, BBVA, Bankia, Caja Mar, Eurocaja Rural, Banco Santander, Unicaja, y Banco Sabadell.

Los delitos más preocupan son el hurto por el método de “la siembra”, así como las estafas clásicas de la estampita y el tocomocho, realizados principalmente por grupos organizados itinerantes que se desplazan por todo el territorio nacional. 

Para el hurto de “la siembra” los autores merodean por las inmediaciones de los cajeros bancarios, sobre todo entre las 9,30 y las 12,30 horas, con la intención de seleccionar a la víctima perfecta, siendo su perfil preferido personas mayores. Uno de ellos observa el número secreto de la víctima cuando opera en el cajero, y posteriormente otro cómplice arroja un billete de 10 o 20 euros en el suelo para, finalmente, justo antes de retirar la tarjeta de la ranura del cajero, tocarle por la espalda en el lado opuesto a la ranura, llamando su atención con la excusa de que se le ha caído un billete. En ocasiones cogen el dinero del dispensador, pero también se ha detectado que a veces cambian la tarjeta por otra de similares características salvo el nombre del titular.

En estos casos de “cambiazo”, la víctima se marcha confiada con su dinero, la tarjeta y otro billete, desconociendo que le han sustraído su tarjeta. Los delincuentes pueden sacar todo el dinero que pueden con la tarjeta y el número secreto en su poder, tardando a veces la víctima varios días en darse cuenta.

La Policía ha ofrecido a los bancos y cajas ofreció la posibilidad de organizar cursos específicos de formación para que sus empleados conozcan el modus operandi de los delincuentes y puedan así colaborar en su detección precoz y alertar de inmediato.