Tras conocer que la multinacional japonesa pretende iniciar en septiembre una nueva etapa con "más de la mitad de la plantilla trabajando" en proyectos actualmente en marcha en la planta y que estaban previstos para 2020, el presidente del comité, Felipe González ha recordado que lo firmado hace dos años incluía que las medidas de flexibilidad temporal se aplicarían en el periodo 2020-2023.

Frente a lo rubricado en 2017, la compañía plantea ahora adelantar las medidas, aduciendo que la reconversión de la planta "se está acelerando".

Según González, esta propuesta "no se ajusta a lo pactado en el acuerdo" de hace dos años, que contemplaba aplicar estas medidas a lo largo de 2020, ya que existe "un compromiso de aplicar cada tramo en su periodo".

Según el presidente del Comité de Empresa, "si existe un cambio en el acuerdo, a lo mejor también tiene que haber cambios en otras cosas" del Plan Industrial firmado por ambas partes.

Dicho plan que contemplaba que la plantilla que quedaría en la fábrica a partir del próximo mes de abril estaría entre 200 y 250, para después ir creciendo a un ritmo de 50 trabajadores al año, hasta retomar el pleno empleo en el año 2024.