El presidente, Agustín González, ha justificado el recurso a expertos dado su contenido “ofensivo, insidioso, falaz y manipulador”, así como en la constatación judicial de que proceden de “alguien de la casa”, estando ya identificada la IP del ordenador del que han podido mandarse.

Así, la empresa Draimware Security Intelligence, dedicada a la seguridad de la información y a la que se ha contratado por 18.000 euros, tiene el encargo no solo de “recabar los datos referentes a unos hechos, posiblemente delictivos” sino también de desarrollar “un informe sobre la seguridad en la red informática de la Diputación y los posibles cambios que se puedan realizar para mejorarla”, todo ello “con la máxima pulcritud y confidencialidad”.

De hecho, la empresa ha iniciado ya su tarea, no sin incidentes, puesto que fue necesaria la presencia de la Policía al registrarse un sabotaje en la red eléctrica de la Diputación mientras se procedía a revisar los discos duros de determinados ordenadores.

La toma de huellas realizada por los agentes policiales y las cámaras de seguridad han permitido avanzar en la localización del responsable de dicho sabotaje, si bien la Diputación no ha facilitado datos al respecto.

No obstante, la situación generada entre la plantilla de la institución provincial ha provocado que el presidente haya enviado a cada trabajador una carta en la que explica la adopción de “medidas extraordinarias” ante “ataques cobardes e injuriosos a empleados, miembros de la corporación provincial y a la imagen de la Diputación”.

En la misiva, González pide “colaboración y paciencia” para llevar a cabo una labor que “resultará beneficiosa para los trabajadores y la institución”, al tiempo que les solicita apoyo en su empeño en “defender la imagen institucional, combatir la rumorología intencionada y sesgada y concebir el trabajo de cada día como algo sagrado y no como algo contaminado”.

“No admitiré, ni consentiré conductas desleales con la institución a la que todos servimos, ni actos que de forma deliberada puedan ocasionarla perjuicio alguno”, concluye su carta a los trabajadores el presidente de la Diputación.

UGT y CCOO
No ha sido la única misiva enviada por Agustín González en las últimas horas en torno a este asunto. El otro destinatario ha sido el presidente de la Federación de Servicios Públicos (FSP) de UGT, José Carlos Pajares, que a su vez pidió al presidente de la Diputación explicaciones sobre la contratación de la citada empresa de seguridad de la información, sobre los objetivos de la misma y sobre la presencia policial en la institución.

González ha empleado doce folios para informar de manera exhaustiva al dirigente sindical acerca de las medidas adoptadas tendentes a descubrir quién está detrás de los citados correos anónimos y a implementar las acciones necesarias en el sistema informático de la Diputación para que hechos de esta naturaleza no vuelvan a repetirse.

Del intercambio epistolar entre Agustín González y José Carlos Pajares cabe deducir que existe cierto enfrentamiento entre ambos a raíz de la polémica suscitada, a diferencia de lo que sucede con CC.OO., que ha difundido un folleto informativo en el que respalda la actuación del presidente de la Diputación y rechaza el comportamiento “desleal” del autor o autores de los correos anónimos enviados.